Se terminan las vacaciones y el ritmo de la casa cambia de la noche a la mañana. Repasamos los desafíos que nos trae la vuelta a clases y te compartimos tips para hacerte la rutina más fácil. 

El veranito se acaba, arranca un nuevo año lectivo  y la casa SE DESCONTROLA. “Uso yo primero el baño“, “¿¡dónde está el pantalón de gimnasia!?”, “apurate que llegamos tarde” y “¿por qué no me levantaste más temprano que tenía que terminar un TP?” son algunas de las frases que vuelven a sonar en el hogar. ¡Pero tranquilos! Porque desde Trono de Familia Bercomat tenemos varios consejitos para hacerte más chill la vuelta a clases. 

Cola y Gritos por el Baño Durante la Vuelta a Clases

¿Qué mejor manera de empezar el día que con una buena pelea por el baño? Chicos contra chicos. Grandes contra grandes. Chicos contra grandes. El baño es un recurso escaso y muy preciado por las mañanas, sobre todo, cuando todos los miembros de la familia tienen el mismo horario.

¿Este problema puede solucionarse por vías diplomáticas? Sí, pero requiere una organización milimétrica, una precisión de reloj para que todos los engranajes funcionen perfectamente, sin pisarse, sin momentos muertos.

¿Es probable que pase? No. Por eso mejor pasemos rápido al plan B: reformar el baño. 

Si tenés la posibilidad, sumar un segundo baño en tu hogar es la mejor alternativa. En este video podés ver cómo armar uno bien chiquito, reconvirtiendo un hall o un pasillo. 

Sino también podés optar por hacer un ante-baño, separando los lavatorios de inodoro–bidet–bañera. Y si en el ante-baño ponés dos bachas ¡WOW! Ahí sí que hackeaste el  sistema como un campeón. 

No lo veas como un gasto de dinero, es más bien una inversión en paz mental. 

Bañarse de Día o de Noche

Organizar el tema del baño evita uno de los conflictos que trae la vuelta a clases. 

La noche tiene una a favor: el baño puede ser más relax y a conciencia. Una forma de distender y sacarse de encima las tensiones del día. Pero, pero, pero… no todo lo que brilla es oro. Y es bien sabido que los chicos dejan el baño para último momento y se van a dormir a cualquier hora con la excusa de no querer irse a la cama con el pelo mojado. Y esto quiere decir que a la mañana no los despierta ni una corneta en la oreja. 

Bañarse a la mañana está bueno porque te despabila, arrancás bien, arriba, con toda la pila para hacerle frente a la profe de matemática. ¿Contras? Uffff… Si todavía no te hiciste el ante-baño, el baño queda completamente inutilizable por los otros integrantes del hogar. Y si en casa se bañan rápido, genial. Pero si son más largueros, quizás puedas ir pensando en ponerle un timer al calefón. 

“Divide y reinarás”, decía Julio César, o Maquiavelo, quién sabe. La cuestión es que chicos de noche y grandes por la mañana puede funcionar muy bien. 

Pedidos de Último Momento. ¡Lo que Llega con la Vuelta a Clases!

¿Cuántas veces se repitió esta escena? Domingo, siete de la tarde comiendo facturas teniendo que cortar todo para conseguir una librería abierta que venda el mapa físico-político n°5  que necesita el nene el lunes a primera hora. 

Bueno, a mentalizarse porque volver al cole es eso también: estar en alerta para tapar goles. Para armar un almuerzo rapidito, una vianda, ayudar con tareas y exámenes olvidados.

¡Dejá tu Casa a Prueba de Todo!

En Familia Bercomat vamos a ayudarte a dejar tu casa lista para afrontar los desafíos de la vida diaria y para que saques su mejor versión en cada rincón y en cada metro cuadrado. Conseguí lo que necesitás en nuestra tienda online o en tu sucursal más cercana. 

¡Te esperamos!

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